'Wonka': una delicia cinematográfica que cierra el año con broche dorado


Una de las películas más esperadas era sin duda Wonka, al no saber qué nos contaría esta precuela de la historia clásica de Roald Dahl, la nueva película dirigida por Paul King es una de las delicias del cine para cerrar el año con broche dorado. 


Con gran expectativa se esperaba esta cinta en la que al ser anunciado que Chalamet sería el chocolatero por excelencia, las redes se encendieron al compararlo de inmediato con Deep, a quien vimos en la entrega pasada, sin embargo, Timothee da una cátedra con su interpretación al cautivarnos con tan emblemático personaje. Cierto es que conocer la juventud de Wonka crea curiosidad después de la oscura entrega de Burton, y esta cinta, nos da tanta luz, al conocer al joven Willy Wonka tan entregado, tan amoroso en medio de un caótico y egoísta mundo. 



La cinta aborda el pasaje, de su llegada a uno de los lugares en los que su mayor sueño es poder crear su propia chocolatería, pero la competencia buscará hundir a este soñador cuyos chocolates son los más ricos, y tras no leer un contrato ahora vive en la posada de la señora Scrubbit, atado a una larga deuda, que lo obligará a estar dentro de la lavandería, pero con la ayuda de sus amigos buscará vender sus deliciosos chocolates y así librarse de ese infierno. 


Si eres amante de los musicales, te encantará, porque en absoluto todos los personajes nos regalan un momento melodioso, pero si lo tuyo no son este tipo de películas no te preocupes, pues creemos que hay un excelente balance entre las actuaciones impecables y las canciones. 



El diseño de producción es gratamente una belleza, los colores vivos, y cada uno de los rincones de esta película cobran vida y están llenos de magia, el desarollo de los personajes es el ideal, cada uno tiene su arco, pero de las historias más lindas es sin duda la de Noodle, con una actuación preciosa de Calah Lane, quien también interpreta una de las mejores canciones del soundtrack en compañía de Timothee. 


Chalamet nos demuestra una vez más que es un actor todo terreno y que la excentricidad que habita en él, le permite construir personajes tan complejos como Paul Atreides, como un tierno y dulce Wonka quien lo da todo, sin recibir nada a cambio. 



Las reflexiones alrededor de esta historia son interminables, desde saber que hay un esperanzador futuro, el no perder la fe, que todo lo bueno que haces siempre vuelve a ti, y sobre todo  que cada cosa buena en este mundo comenzó con un sueño,mensajes que sin duda llegan como un bálsamo en la mejor época del año. 


No esperes más y corre a disfrutar con tus amigos, familia o tu pareja de Wonka,ya disponible en todos los cines de México.

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'Tótem' Un relato íntimo, tierno y doloroso a la vez